La Comisión Europea concedió el 5 de octubre los premios Green Leaf 2025 a las ciudades de Viladecans y Treviso (Italia). La ceremonia de entrega de los galardones, dotados con 200.000 euros, que tienen que servir para ayudar la ciudad a organizar nuevas actividades transformadoras, se celebró en el auditorio del KultuuriKatel (Tallin Creative Hub) de Tallin, capital de Estonia.
Ambas ciudades competían entre ellas, en principio, por un solo premio, pero la calidad de las candidaturas hicieron decidir las autoridades comunitarias que ambas ciudades eran merecedoras del premio. Viladecans y Treviso, además, han adquirido el derecho a formar parte de Green Leaf, una red europea de ciudades líderes que intercambian conocimientos, experiencias y buenas prácticas. El alcalde Carles Ruiz agradeció a las autoridades comunitarias “el reto que nos habéis confiado: ahora tenemos dos años para acabar de movilizar toda una ciudad y ser un ejemplo en todo Europa de vida saludable y de sostenibilidad”.
El premio Green Leaf reconoce los municipios que destacan por su compromiso de abordar los desafíos ambientales urbanos y demostrar que la sostenibilidad es posible y una prioridad en el desarrollo de la ciudad. Son territorios que se encaminan a dar una mayor calidad de vida a sus habitantes estimulando nuevas actividades de transformación hacia una transición ecológica. El premio lo otorga la Comisión Europea anualmente y se tienen en cuenta indicadores medioambientales. Se valoran la visión, la propuesta de comunicación y gobernanza de las ciudades.
Un total de catorce ciudades han competido, siendo evaluadas por un grupo internacional de siete expertos independientes en sostenibilidad urbana, que seleccionó cinco ciudades finalistas. Los finalistas fueron entrevistados por un jurado internacional formado por representantes de la Comisión Europea, el Comité de las Regiones, la Oficina del Pacto de Alcaldes, la Agencia Europea de Medio Ambiente y la Oficina Europea de Medio Ambiente.
El jurado europeo quedó impresionado con el enfoque de Viladecans “para inspirar un cambio de comportamiento a través de una cultura de positividad y entusiasmo”. El jurado también reconoció que “los residentes y las partes interesadas a diferentes niveles participaron en diferentes procesos de toma de decisiones y que la ciudad ha hecho adelantos significativos en las energías renovables y la eficiencia energética. Como ganadora de Green Leaf, la ciudad se centrará en dos objetivos paralelos: la transición ecológica y la promoción de un estilo de vida saludable”. Viladecans convenció el jurado de que “un enfoque positivo de los retos de la sostenibilidad aporta esperanza e inspira sus propios residentes y animará otras ciudades a trabajar por un futuro más verde”.
Uno de los rasgos diferenciadores de Viladecans es haber sabido preservar y mejorar los cinco ecosistemas y la biodiversidad que contienen los poco más de cinco kilómetros de su término municipal: la zona forestal, urbana, la llanura deltaica, la marisma y la zona dunar.